Cada vez me cuesta menos hacer la maleta. Imagino que es cierto el refrán y la práctica hace al maestro. En este caso tengo que agradecer a las aerolíneas lowcost y sus políticas de equipaje. Desde que te hacen pagar por la maleta de mano, me he vuelto mucho más selectiva. Los por si acasos han dejado de tener cabida en mi mochila y tiro de imprescindibles.
Justo en este post te hago un listado de aquellos items que no puedes olvidar al preparar tu maleta. Abre tu app de notas o coge cuaderno y boli si sigues siendo una romántica como yo y apunta bien.
Todo aquel que necesita más de una maleta es un turista, no un viajero.
Ira Levin
¿Sólo una mochila?
Al principio me parecía imposible dar cabida en una simple mochila a todo lo necesario para viajar 2 o 3 días. Pero he llegado a viajar 5 días con una simple bolsa apta para viajar en Ryanair sin pagar suplemento.
Y te preguntarás, ¿dónde está el truco? Bien, en primer lugar la elección de mochila es clave. Yo uso una bolsa tipo saco de gimnasio que me va genial para colocar ropa y zapatos. Aunque no cumplen estrictamente con las medidas estipuladas, como no son rígidas es fácil adaptarlas.
Nunca he tenido que hacerlo, pero llegado el caso, me pondría ropa encima hasta que consiguiera pasarlas por el temido medidor de equipajes. Yo tengo comprobado que cuando ven mochilas de este tipo, ni se molestan en medir.
Vale, ¿qué no debo olvidar?
Te voy a hacer una lista de imprescindibles con los que viajar sin pasar ningún apuro. Ya verás, si aún no los conocías, te acordarás de mí cuando tengas que hacer uso de alguno de ellos:
- Ropa interior y ropa. Vale, no te descubro nada nuevo. Simplemente, intenta aprovechar los mismos pantalones o falda para crear más de un conjunto.
- DNI, pasaporte, carnet de conducir y móvil. Así quitamos las obviedades ya de una.
- Chanclas. Especialmente si vas a hostales o existe la posibilidad de que te bañes.
- Toalla tipo Decathlon. De esas que no ocupan nada.
- Batería portátil y cargador. Una buena batería externa con capacidad para dos cargas como mínimo se ha convertido en un must para mí. Me ha salvado de más de una situación de emergencia.
- Cortauñas o lima. Para mí, por lo poco que ocupa, vale la pena llevarlo. Una uña rota molesta mucho.
- Pinzas. Unas cejas bien arregladas son necesarias para ir por el mundo. Se tenía que decir.
- Una navajita con tenedor incorporado. Desde que me lo compré en Vall de Nuria hace años, me acompaña siempre. Mientras la hoja sea más corta que lo largo de una tarjeta de crédito o DNI, puedes pasar por el control con ella sin problema. Para comer o como utensilio, en mi top 5.
- Ibuprofeno/paracetamol. Que un dolor de cabeza o de regla no te amargue el día. En según qué países y situaciones te costará encontrar una farmacia donde comprarlos.
- Compeed. Estas tiritas son gloria bendita para heridas y rozaduras en los pies. Si no las conocías y vas a pegarte caminatas largas, de nada. 😉
- Bolsa de tela. Para meter compras o como bolso. Me da la vida.
- Crema de manos y cacao. Vale, esto igual imprescindible, imprescindible no lo verás. Pero para mi significan comodidad.
- Ir con los mapas del destino en cuestión descargados en el móvil.
- Toallitas húmedas. Si todavía no te acompañan niños en tus rutas y no sueles llevarlo en el bolso por defecto, te lo recomiendo. Salva más de una situación incómoda.
- Cepillo y pasta de dientes. Un clásico y una obviedad, pero se lo deja más de uno.
- Pañuelo o fular. Te servirá para protegerte de las temperaturas bajo cero que suele hacer en los aviones y aeropuertos además de para taparte si vas a visitar lugares de culto y sagrados que requieran no mostrar hombros y/o rodillas.
Si por lo que sea es imposible viajar tan ligero y vas a facturar, ten en cuenta dos cosas importantísimas. Lleva contigo en el bolso o mochila un recambio de ropa interior y todo lo que puedas de lo que he incluido en mi lista. Si te pierden la maleta, puedes tirar el primer día perfectamente. Y asegúrate de que en tu maleta facturada consta claramente tu nombre y teléfono móvil para que puedan contactar contigo llegado el caso. Si puedes, añade un libro a tu equipaje. Siempre puedes llevarlo en la mano al embarcar y así no te ocupa.
No seas un mero coleccionista
Aprovecho para ponerte en modo alerta e ir con cuidado en no convertirte en un coleccionista de destinos. Tendemos, y yo soy la primera que tenía este chip, a querer visitar muchos destinos para poder ir tachando del mapa los países pendientes. ¡Evítalo! No por ir un fin de semana a Viena, conocerás Austria, ni siquiera podrás decir que conoces bien la propia capital.
Las personas viajan a destinos distantes para observar, fascinadas, el tipo de gente que ignoran cuando están en casa.
Dagobert Runes
Las redes sociales han hecho mucho daño y parece muchas veces que haya que ir deprisa y corriendo para cubrir la lista de lugares que visitar en el destino en cuestión. Cambia la manera de plantearlo. Viaja saboreando cada momento, deteniéndote en aquellos lugares que llamen tu atención o te produzcan una paz especial. No hace falta viajar a muchos países ni viajar lejos para crecer, descubrir lugares y costumbres diferentes.
Espero que con este post te sea más fácil preparar la maleta la próxima vez que viajes. Ojalá que vayas donde vayas, vuelvas con la mochila más llena pero más ligera que al partir.
¡Nos leemos!
4 comentarios en «Bolsillo viajes. Qué no puedes olvidar en tu maleta.»