
Esta isla se presta a que la leas despacio. Especialmente en invierno. Espero que tú, estés donde estés, encuentres ese espacio y momento para ti. Para escucharte, leer(te) y tomarte los días con calma. Que con tranquilidad, se respira mejor. Sí, hoy estoy filosófica. Qué le vamos a hacer. Si es tu primer día por mi blog, no te asustes. Tengo mis momentos.
En este post, te voy a invitar a que empieces algo nuevo y te daré mis recomendaciones literarias del mes.
Vosotros, que pasáis por este mundo, seguid con vuestros cantos y vuestras rondas. Yo estoy aquí… y rezo para que, en medio de la agitación y el ruido, si llegarais a caer… una mano amiga os devuelva sin juzgaros al gran torbellino de la vida, en el que seguiréis danzando.
Prólogo de Las Vencedoras. Monja anónima, convento de la Cruz, s. XIX
Dame más vida x1
Lo admito. Si eres de las que envías audios por whatsapp y me hubieras enviado uno hace dos o tres meses, te hubiera estado escuchando en x1,5 o x2. Depende de lo inspirada que me hubieras parecido. Pero últimamente, he bajado el ritmo. Uno de mis propósitos (no escritos todavía, Aurora, no me mates) es llegar con más tiempo a mis compromisos o citas. Lo cierto es que, desde que lo he puesto en práctica, me siento mucho mejor. Y con los audios, lo mismo. Ahora los escucho en x1, como pasa todo en la vida, vamos. Y los disfruto más.
Dentro de esta dinámica de ir más lenta y tomármelo todo con más calma, me pregunté a mí misma, qué tenía ganas de empezar. Si es que quería empezar algo nuevo. Y me encontré respondiendo que quería aprender más música. Siempre me ha gustado cantar. Desde pequeñita ya enganchaba el karaoke con cassette que me trajeron por mi tercer cumpleaños y entonaba cualquier hit infantil que me pasara por delante.
Pues desde que he empezado en el coro góspel, me apetece mejorar. Así que ahí voy. Ayer tuve mi primera clase de técnica vocal y hoy empiezo en la escuela de música clases para adultos. Y tú, ¿qué llevas tiempo queriendo empezar pero ni te has dado la oportunidad de intentarlo? Vamos. No esperes más. Coge teléfono o las llaves del coche y apúntate hoy a lo que sea que te apetezca intentar.
Qué leer – febrero
Muchas veces, los personajes de las historias que leo, se sientan conmigo a la hora del café y me hablan. Me dejan sus ganas de vivir, o de cambiar o de viajar. Es un hecho contrastado que una buena parte de lo que soy, además de tener origen en mis vivencias, tiene como punto de partida los libros que he leído. Este mes, te recomiendo buscar tu futuro yo en los siguientes libros. Ya sea en tu biblioteca o en tu librería favorita, corre a por ellos. Mejor dicho, camina, con calma, a por ellos:
- Los parentescos – Carmen Martín Gaite. Este año 2025 se cumplen cien años desde su nacimiento. Descubrí a esta escritora salamantina en un club de lectura de relato corto de la biblioteca de Mahón. Si vives por la zona, te recomiendo que vengas al siguiente. Lo dirige (mi querida) Ana Haro, que es la culpable de que escriba cada día desde la pasada primavera. Lo hacen el primer lunes de cada mes y todavía tienes hasta mayo para venir a probar. Me encantó Martín Gaite. Su manera de contar historias, me dejó fascinada. Espero que te guste, aunque no tenga final.
- Las vencedoras – Laetitia Colombani. Ya me gustó La Trenza y esta historia me encantó. Te hace reflexionar sobre la cruda realidad de las personas que no tienen dónde vivir y la suerte que tenemos de mucha cosas que damos por sentadas (una ducha caliente, una cama para dormir, la llave de nuestra casa). A ver qué te parece a ti.
- El secreto de la vida eterna – Manel Esteller i Salvador Macip. Este es uno de los últimos libros que estoy leyendo ahora. Nunca suelo tener sólo uno en marcha. Estos dos médicos investigadores ponen sobre el papel de forma sencilla, los últimos descubrimientos acerca del envejecimiento. Intentan, y creo que consiguen, que entendamos por qué envejecemos, morimos, nos vamos deteriorando. Y esa es la base para cualquiera que quiera aprender a vivir mejor y más años.
Bons anys!
En catalán cuando se felicita el cumpleaños a alguien se dice «Molts d’anys» que viene a ser muchos años. Pues bien, mi abuelo siempre decía, que no sean muchos, que sean buenos. Pues creo que ese tendría que ser nuestro objetivo, cada día. No vivir mucho, sino vivir bien. Sacar un momento cada día en el que hagamos algo que nos haga feliz (¡ojalá que sea más de uno!). Ah! y lee. Eso siempre suma.
D’entre els grans misteris que ens planteja la vida, n’hi ha un d’especialment intrigant: per què envellim?
Prólogo de El Secreto de la Vida Eterna
¡Nos leemos!
1 comentarios en «Bolsillo libros. Tus libros de ahora, serán tú yo mañana.»